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Adolescencia perpetua.

Adolescencia perpetua.

Adultos adolescentes

La adolescencia perpetua en estos días es un fenómeno bastante común. La adolescencia se ha hecho más larga y dolorosa en el tiempo. Veo a mi alrededor personas de 35 y hasta rondando los 50 años que están anclados en una adolescencia sin fin. En mi niñez encontrarse con un treintañero de brazos caídos era difícil. En realidad tener treinta años en aquellos días, era ya ser mayor, ser un viejo. Si no estabas casado y no tenías una vida propia y estabilidad económica, chic@ tenías un problema.

Hombres cuarentones llaman angustiados o afligidos solicitando ayuda al psicólogo@ o al psiquiatra. No saben que hacer con su vida, ni quienes son, ni hacia donde van. En verdad es un drama. La situación es que la mayoría no se da cuenta que sigue anclado en una adolescencia eterna. Viven en casas de sus padres consumiendo los pocos recursos que entran al hogar, no se dan cuenta o sí, pero prefieren quedarse así. En su zona de confort porque han normalizado esa situación. Lo más dramático es que consiguen pareja y la meten en casa también y tienen hijos incluso. Haciendo caer a sus padres y a sus parejas en una pobreza y calamidad.

¿De quien es la culpa? ¿Del estado?. Es lo que siempre dicen, la culpa es del estado. Nosotros y nuestros hijos hacemos el estado. Existen adolescentes cuarentones que no mueven un dedo en casa, ni siquiera se cuidan a sí mismos. No se atienden, no hacen su cama, no tiran la basura, no se duchan e incluso no se lavan los dientes. Gran parte de la culpa es de los padres, pues he visto padres que no dejan trabajar estos nenes grandes, porque no quieren que los exploten. Estos padres sobreprotegen y desvalorizan a sus hijos.

Hace unos días un consultante me comentó vía whatsaap: Ayer me rasuré, me miré en el espejo y me pregunté ¿Cómo has cambiado tanto?, ¿Qué te pasó?. En eso se cercó mi madre y me dijo; ¡Tan guapo mi hijo pero que desperdicio!. Me horroricé de semejante boicot. Él simplemente se quedó con lo de guapo, y el que su madre le haya criticado de esa forma tan cruel simplemente lo tiene normalizado. Ah, pensé ahora entiendo el porqué lo de tu adolescencia perpetua.

Recuerdo que de pequeña se nos preparaba para independizarnos, para que nos fuéramos de casa y nos hiciéramos a nosotros mismos. Nos ponían a trabajar, nos trabajan la voluntad aunque fuera en tareas pequeñas del hogar y nos enseñaban el valor del dinero y el trabajo honrado. En la actualidad los muchach@s son haraganes y solo quieren parasitar.

Vivimos unos tiempos en que los padres son muy incoherentes; Les dicen a sus hijos que se tienen que ir de casa y buscarse la vida pero a la vez les infunden mucho miedo y menosprecian sus logros. También les dicen que la vida afuera es difícil y muy peligrosa, que trabajar es duro y que hay muchas personas malas esperándoles para hacerles daño y aprovecharse de ellos.

Con esa visión del futuro tan deprimente y tan amenazadora qué adolescente querrá forjarse una vida, una estabilidad afuera. Se quedan encapullados. Los padres deben de ser más conscientes, ser más responsables en la crianza de sus hijos. Apoyar y alabar sus logros por muy pequeños que estos sean.

Que desarrollen su fuerza de voluntad desde muy pequeños y permitirles explorar hacia afuera. Para que no se queden estancados en la vida, ya que a la larga estos adolescentes de papa y mama acaban muy trastornados o enfermos mentalmente engrosando las filas de la sanidad mental en la adultez. Afectando por rebote a sus padres, causando gran sufrimiento dentro del la familia. Es menester no caer en ese estilo de crianza porque terminará por afectar no solo el núcleo familiar primario sino que este estilo terminara heredándose a las generaciones venideras, creando una espiral de sufrimiento y estancamiento que nunca acabara. Es decir una adolescencia perpetua.

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